martes, 26 de mayo de 2015


Juan Carlos Onetti — “BALADA DEL AUSENTE”

Entonces no me des un motivo por favor
No le des conciencia a la nostalgia,
La desesperación y el juego.
Pensarte y no verte
Sufrir en ti y no alzar mi grito
Rumiar a solas, gracias a ti, por mi culpa,
En lo único que puede ser
Enteramente pensado
Llamar sin voz porque Dios dispuso
Que si Él tiene compromisos
Si Dios mismo le impide contestar
Con dos dedos el saludo
Cotidiano, nocturno, inevitable
Es necesario aceptar la soledad,
Confortarse hermanado
Con el olor a perro, en esos días húmedos del sur,
En cualquier regreso
En cualquier hora cambiable del crepúsculo
Tu silencio
Y el paso indiferente de Dios que no ve ni saluda
Que no responde al sombrero enlutado
Golpeando las rodillas
Que teme a Dios y se preocupa
Por lo que opine, condene, rezongue, imponga.
No me des conciencia, grito, necesidad ni orden.
Estoy desnudo y lejos, lo que me dejaron
Giro hacia el mundo y su secreto de musgo,
Hacia la claridad dolorosa del mundo,
Desnudo, sólo, desarmado
bamboleo mi cuerpo enmagrecido
Tropiezo y avanzo
Me acerco tal vez a una frontera
A un odio inútil, a su creciente miseria
Y tampoco es consuelo
Esa dulce ilusión de paz y de combate
Porque la lejanía
No es ya, se disuelve en la espera
Graciosa, incomprensible, de ayudarme
A vivir y esperar.
Ningún otro país y para siempre.
Mi pie izquierdo en la barra de bronce
Fundido con ella.
El mozo que comprende, ayuda a esperar, cree lo que ignora.
Se aceptan todas las apuestas:
Eternidad, infierno, aventura, estupidez
Pero soy mayor
Ya ni siquiera creo,
En romper espejos
En la noche
Y lamerme la sangre de los dedos
Como si la hubiera traído desde allí
Como si la salobre mentira se espesara
Como si la sangre, pequeño dolor filoso,
Me aproximara a lo que resta vivo, blando y ágil.
Muerto por la distancia y el tiempo
Y yo la, lo pierdo, doy mi vida,
A cambio de vejeces y ambiciones ajenas
Cada día más antiguas, suciamente deseosas y extrañas.
Volver y no lo haré, dejar y no puedo.
Apoyar el zapato en el barrote de bronce
Y esperar sin prisa su vejez, su ajenidad, su diminuto no ser.
La paz y después, dichosamente, en seguida, nada.
Ahí estaré. El tiempo no tocará mi pelo, no inventará arrugas, no me inflará las mejillas
Ahí estaré esperando una cita imposible, un encuentro que no se cumplirá.


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Miles Davis‬ (born May 26, 1926)

“La verdadera música es el silencio; las notas sólo están para proporcionar un marco a ese silencio.”
“La véritable musique est le silence et toutes les notes ne font qu'encadrer ce silence.”
“La vera musica è il silenzio e tutte le note sono soltanto l'incorniciare questo silenzio.”
“The real music is the silence and all the notes are only framing this silence.”
— Miles Davis

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Frida Kahlo - ''Viva la Vida, Watermelons'', 1954.
Oil on masonite. 23 ½" x 20". Frida Kahlo Museum. Coyoacán, Mexico.

En el libro "Frida Kahlo - Naturalezas muertas", el autor Salomon Grimberg sugiere que "Viva la vida" podría no haber sido pintada en 1954 y fue probablemente pintado en 1952, pero la inscripción no se incluyó en ese momento. Sintiendo que su muerte era inminente, unos pocos días antes de su muerte, por última vez Frida puso el pincel en la pintura roja para añadir la inscripción y firmarla…como si se estuviera despidiendo.

In the book "Frida Kahlo - The Still Lifes", the author, Salomon Grimberg, suggests that "Viva la Vida" could not have been painted in 1954 and was probably painted in 1952 but the inscription was not included at that time. Sensing that death was imminent, just days before her death one last time Frida dipped her brush into the red paint to add the inscription and sign it…as if she was "signing off".

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Antonio Berni - ''Manifestación'', 1934.

Temple sobre tela del artista argentino Antonio Berni (1905-1981). Obra emblemática del arte nacional que data de 1934 y se refiere a la crisis de los 30: la desocupación, la pobreza, el nazismo, el facismo y la guerra civil española, que afectaban la sensibilidad del artista. El retrato humano fue uno de los géneros que más desarrolló Berni bajo las más variadas técnicas, siempre ligado a su compromiso de denuncia, máximo exponente del realismo social en Argentina.