Recordando al Maestro
Astor PIAZZOLLA en el aniversario de su nacimiento:
Astor Piazzolla (Born March 11, 1921, Mar del Plata, Argentina)
Ástor Pantaleón Piazzolla, bandoneonista, pianista, director,
compositor y arreglador argentino [11 de marzo de 1921 – 4 de julio de
1992]. Piazzolla no es sólo el músico de tango más célebre en el mundo,
sino también un compositor cultivado por notables concertistas
internacionales, conjuntos de cámara y orquestas sinfónicas. Es posible
que haya llevado al tango hasta sus límites, tan lejos -estéticamente
hablando- que muchos tanguistas no tuvieron capacidad de acompañarlo ni
de entenderlo. A los que sí lo siguieron, y a los que vinieron después,
les legó el difícil problema de sustraerse, aunque sea en parte, de su
influencia y de encontrar un nuevo rumbo después de su obra. El
"postpiazzollismo" es hasta ahora una colección de intentos, importantes
algunos pero insuficientes.Su inserción en el medio tanguero de Buenos
Aires comenzó en 1938, precisamente la época en que el tango despertaba
aceleradamente de su relativo letargo, iniciado alrededor de 1930. La
relación de Piazzolla con ese medio fue complicada, mezcla de amor y
desprecio, de admiración y resquemor. Pero su lucha, que era la de un
artista tan dotado como innovador, contra la mediocridad y el
conservadurismo, la libró desde el interior del tango, con profundas
raíces en él, tocando con orquestas ajenas o propias en palcos de café o
en oscuros clubes suburbanos. Este barro ya no lo tienen en sus botas
los postpiazzollanos.A pesar de esta raigambre y de la profunda esencia
tanguera de todo lo que hacía Astor, incluso cuando se trataba de otra
música, desde mediados de los '50 se extendió entre sus detractores una
muletilla presuntamente descalificadora: "Piazzolla no es tango", como
expresión absoluta del quietismo y la intolerancia. No obstante ese
antagonismo, varios tangos fueron escritos en su homenaje, uno de ellos
por Julio De Caro, figura capitular del género, testimoniando la
admiración que despertaba ese personaje áspero y combativo, que rompía
todos los moldes.Astor Pantaleón nació en 1921 en Mar del Plata, cuando
este puerto pesquero del Atlántico, 420 kilómetros al sur de Buenos
Aires, era a la vez un balneario aristocrático, aún no masivo. En 1924
pasó a vivir con sus padres en Nueva York, donde en 1929 sobrevino su
encuentro con el bandeoneón. En 1932 compuso su primer tango, "La
catinga", nunca difundido, e intervino como actor infantil en "El día
que me quieras", film cuya estrella era Carlos Gardel.Ya de regreso en
Mar del Plata, en 1936 comienza a formar parte de conjuntos locales y a
conducir incluso uno que adoptaba el estilo del Sexteto Vardaro, que a
partir de 1933 había intentado una audaz superación estilística,
desdeñada por las grabadoras. Su líder, el violinista Elvino Vardaro,
tocaría muchos años después para Piazzolla.En 1938 llegó a Buenos Aires,
donde, luego de pasar brevemente por varias orquestas, fue incorporado a
la del bandoneonista Aníbal Troilo, que se había constituido en 1937 y
jugó un papel trascendental en el apogeo del tango en los dos decenios
siguientes. Además de bandoneón de fila, Astor fue allí arreglador y
ocasional pianista, en apurado reemplazo de Orlando Gogni [o Goñi], tan
brillante como incumplidor. Troilo prohijó a Piazzolla, pero también
recortó su vuelo para ceñirlo a los límites de su estilo, que no debía
trasponer la capacidad del oído popular.El ímpetu renovador de Astor
comenzó a desplegarse en 1944, cuando abandonó a Troilo para dirigir la
orquesta que debía acompañar al cantor Francisco Fiorentino. Aquella fue
la extraordinaria conjunción de un vocalista enormemente popular y un
músico de talento único. Quedaron de ese binomio 24 temas grabados, con
versiones descollantes [los tangos "Nos encontramos al pasar", "Viejo
ciego" y "Volvió una noche", entre otros]. La serie incluye los dos
primeros instrumentales registrados por Piazzolla: los tangos "La
chiflada" y "Color de rosa".Tras aquella experiencia inaugural, Astor
lanzó su propia orquesta en 1946, todavía ajustada a los cánones
tradicionales del género. Como tal se instaló desde su inicio entre las
agrupaciones más avanzadas, junto a las de Horacio Salgán,
Francini-Pontier, Osvaldo Pugliese, Alfredo Gobbi y el propio Troilo.
Entre sus cantores sobresalió Aldo Campoamor. Hasta 1948 grabó un total
de 30 temas, entre ellos versiones antológicas de tangos como
"Taconeando", "Inspiración", "Tierra querida", "La rayuela" o "El
recodo". Entre los registros se destacan cinco obras del propio
Piazzolla, que ya anuncian -particularmente en los casos de "Pigmalión" y
"Villeguita"- al genial compositor.Este surge muy pronto en toda su
hondura y originalidad con tangos de inigualada inspiración: "Para
lucirse", "Prepárense", "Contratiempo", "Triunfal", "Contratiempo" y "Lo
que vendrá". Esas piezas son incorporadas al repertorio de importantes
orquestas, como las de Troilo, Francini-Pontier, Osvaldo Fresedo y José
Basso, muchas veces con arreglos escritos por el propio Piazzolla.
Mientras tanto, su orquesta graba entre 1950 y 1951 cuatro obras, dos de
ellas en un memorable disco de 78 revoluciones: los viejos tangos
"Triste" y "Chiqué".En los primeros años '50 Piazzolla dudó entre el
bandoneón y el piano, y pensó volcarse a la música clásica, en la que ya
venía incursionando como compositor. Con esas ideas se trasladó en 1954
a Francia, becado por el Conservatorio de París, pero la musicóloga
Nadia Boulanger lo persuadió de desarrollar su arte a partir de lo que
le era más propio: el tango y el bandoneón. Allí graba en 1955, con las
cuerdas de la Orquesta de la Opera de París, Martial Solal al piano y él
mismo en bandoneón, 16 temas, todos suyos salvo dos. Aquello fue un
nuevo torrente de asombrosa melopea, con tangos como "Nonino"
[antecedente del célebre "Adiós, Nonino", emocionada despedida a la
muerte de su padre], "Marrón y azul", "Chau, París", "Bandó", "Picasso" y
otros.De regreso en la Argentina, Piazzolla se desplegaría en dos
direcciones. Por un lado, la orquesta de bandoneón y cuerdas, con la que
dio a conocer una nueva generación de tangos suyos, de actitud ya
rupturista, como "Tres minutos con la realidad", "Tango del ángel" y
"Melancólico Buenos Aires". Su repertorio incluía por entonces también
tangos tradicionales releídos y otros más actuales de diferentes
músicos, como "Negracha" [Pugliese], "Del bajo fondo" [José y Osvaldo
Tarantino] o "Vanguardista" [José Bragato]. La orquesta contaba con el
cantor Jorge Sobral, ya que Astor quería extender al tango canción su
propuesta renovadora.La otra gran empresa de Piazzolla en esa época fue
la creación del Octeto Buenos Aires, en el que reunió a ejecutantes de
gran nivel y con el cual subvirtió todo lo conocido en tango hasta
entonces. Hay quienes juzgan a ese Octeto como el cénit artístico de
toda su carrera. Aquel conjunto, que grabó sólo dos long-plays medianos,
se dedicó sobre todo a reinterpretar grandes tangos tradicionales, como
"El Marne", "Los mareados", "Mi refugio" o "Arrabal".En 1958 Piazzolla
se estableció en Nueva York, donde vivió circunstancias muy difíciles.
De aquella infeliz etapa quedó su experimento de jazz-tango, que él
mismo juzgó con dureza -excesiva tal vez- por la concesión comercial que
supuso. Pero al retornar a Buenos Aires en 1960 creó otro de los
conjuntos fundamentales de su trayectoria: el Quinteto Nuevo Tango
[bandoneón, piano, violín, guitarra eléctrica y contrabajo], que causó
furor en ciertas franjas de público, entre ellas el universitario.Esta
formación, cuyos integrantes fueron cambiando con el tiempo, frecuentó
un repertorio variado, que incluyó nuevos tangos del director, como
"Adiós, Nonino", "Decarísimo", "Calambre", "Los poseídos", "Introducción
al ángel", "Muerte del ángel", "Revirado", "Buenos Aires Hora 0" y
"Fracanapa", entre otros. Con la voz de Héctor de Rosas realizó notables
versiones de "Milonga triste" y tangos como "Cafetín de Buenos Aires",
"Maquillaje", "Nostalgias" y "Cuesta abajo", entre otros.En 1963 retornó
a un fugaz Nuevo Octeto, que no alcanzó el óptimo nivel del anterior
pero le permitió incorporar nuevos timbres [flauta, percusión, voz].
Entre las diversas realizaciones de esos años intensos, sobresalen dos
acontecimientos de 1965. Uno es el concierto que con el Quinteto ofrece
en el Philarmonic Hall of New York, dando a conocer la Serie del Diablo y
la completada Serie del Ángel, además de "La mufa". A su vez, graba en
Buenos Aires una serie de excepcionales composiciones suyas sobre poemas
y textos de Jorge Luis Borges [con su mitología de cuchilleros de
arrabal], con el cantor Edmundo Rivero y el actor Luis Medina Castro.
Ese mismo año dio a conocer "Verano porteño", primero de los
valiosísimos tangos que conformarán las Cuatro Estaciones.Comienza luego
su producción con el poeta Horacio Ferrer, con quien creó la operita
María de Buenos Aires [que comprende el admirable "Fuga y misterio"] y
una sucesión de tangos. En 1969 lanzaron "Balada para un loco" y
"Chiquilín de Bachín", que de pronto le proporcionaron a Piazzolla
éxitos masivos, a los que no estaba habituado. Ese año los grabó por
partida doble, con la cantante Amelita Baltar y con el cantor Roberto
Goyeneche.En 1972, en otro gran momento de Piazzolla y tras haber
registrado el año anterior el magnífico LP "Concierto para quinteto",
formó Conjunto 9, con el que grabó "Música contemporánea de la ciudad de
Buenos Aires", como trascendiendo la discusión sobre la tanguidad. Los
álbumes que realizó ese noneto incluyen los sobresalientes "Tristezas de
un Doble A", "Vardarito" y "Onda nueve". Tras abandonar nuevamente la
Argentina, Astor inició su fructífera etapa italiana, donde entre otras
obras dio a conocer "Balada para mi muerte", con la cantante Milva,
"Libertango" y la conmovedora "Suite troileana", que escribió en 1975
bajo el impacto que le causó la noticia de la muerte de Troilo.Tres años
después compuso y grabó con orquesta una serie de obras dedicadas al
campeonato mundial de football, esa vez disputado en la Argentina,
durante la sangrienta dictadura militar implantada en 1976, que manipuló
políticamente ese torneo. Se trató de un deplorable paso en falso de
Piazzolla.En 1979, de nuevo con su quinteto, presentó "Escualo", entre
otros temas. A lo largo de aquellos años y los siguientes, Astor unió su
talento al de artistas de diversos orígenes, como George Moustaki [para
quien compuso los bellísimos temas "Hacer esta canción" y "La
memoria"], Gerry Mulligan y Gary Burton. Entre otras variadas
performances, el disco recogió una apoteótica actuación del quinteto en
1987 en el Central Park de Nueva York. La última formación de Piazzolla
fue un sexteto, que sumaba un segundo bandoneón al quinteto y
reemplazaba el violín por el violoncello.Además de obras de concierto y
música para cerca de 40 películas, Astor concibió numerosísimas piezas
breves [tangos o no] omitidas en esta apretada reseña. Entre ellas
figuran "Juan Sebastián Arolas", "Contrabajeando" [escrito con Troilo],
"Tanguísimo", "La calle 92", "Oblivion", "Años de soledad", "Los pájaros
perdidos", "Lunfardo", "Bailongo", "Vuelvo al Sur" y la serie "La
camorra". Bucear en la inmensa obra de Piazzolla, encontrar partituras y
arreglos o idear otros nuevos es hoy la fascinante tarea de músicos de
todo el mundo.
https://www.facebook.com/PuertoLibre http://twitter.com/PuertoLibre1